Nunca tomó esposa. Nunca formó una familia. Nunca
reconoció ningún hijo. A la política, al
poder y a los libros, dedicó toda su productiva y distinguida
existencia. Seguro si estamos, que su despedida de la vida, no
será mas que el anuncio de su definitiva entrada en la
historia, a partir de donde dejará de ser noticia para
convertirse en leyenda.
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"Personajes nacionales"
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