Al
sur del país, entre la cordillera Central y la sierra Martín
García, se extiende en dirección este-oeste con
una longitud de unos 70 Km. y un área de 400 Km2.
Antes del mioceno, este llano de Azua formaba, con el valle de
San Juan, una sola fosa de sedimentación. Los levantamientos
de el período pleistoceno desviaron el río Yaque
del Sur hacia la bahía de Neiba. Así mismo establecieron
una separación entre el valle de San Juan y el llano de
Azua. Viajando desde Azua a San Juan o Barahona, se notan la división
entre las dos llanuras, por cerros que se levantan para unir la
sierra de Neiba con la cordillera Central.
Los aluviones de la era cuaternaria han rellenado la fosa por
depósitos aluvionales y fluviales con mucho material suelto.
Los ríos tienen escorrentía superficial temporal,
los más importantes:
Jura, Tábara, Vía, etc., pero el subterráneo
es rico de agua.
El llano de Azua es muy árido, sotavento de la cordillera
Central, lo que ocasiona que los vientos alisios lleguen secos
a la llanura.
La vegetación es de plantas xerófilas y árboles
de madera dura, únicas plantas que pueden resistir a las
largas sequías.
Clima seco estepario.
Cultivo agrícola como tomate industrial, plátano,
sorgo, maíz, frutas, legumbres, etc., base de riego. Antes
de la construcción del canal “Yaque del Sur”
(presa de Sabana Yegua), se irrigaba con las aguas subterráneas.
Las playas como Monte Río, playa Blanca, etc. |